CON FRANCO VIVÍAMOS MEJOR

El IVA sube, pero también desaparece. El impuesto se exime en la reparación de una grifería, en una mudanza e incluso en la reforma completa de una vivienda. No podríamos salir a la calle con un 25% de paro real. La subida libre del IVA, desde su inserción en nuestro país en 1986, logrará que la economía sumergida emerja. Mariano Rajoy advirtió el lunes que el incremento del impuesto era favorable, contra la negativa opinión general. Minutos más tarde afirmaba que jamás hubiera tomado dicha medida ante una situación normal. En España nunca hemos vivido una situación “normal”. Quedan pues advertidos los israelíes por nuestro estadista: los muy incrédulos llevan bajando el IVA, lenta y progresivamente,  desde 2004.

La proliferación de empresarios sin factura no se debe tanto a las subidas del IVA como a que, la mayoría de ellos, trabajan afiliados al SOIB. La causa del establecimiento de esta red laboral la encontramos en las medidas de alivio que nuestro gobierno, con o sin corbata, ha tomado para con los parados. Hasta llegado el momento en que ni un arquitecto encuentra trabajo en España, lo corriente era “me buscaré un curro cuando deje de cobrar del paro; me queda un año”. El año sabático que hemos vivido todos los españoles.

Las medidas para ayudar al parado y frenar el desempleo han sido tomadas erróneamente y a consciencia, con el fin de satisfacer un ansia popular inmediata y volver a ganar las próximas elecciones. Pan para hoy, hambre para mañana. Este es nuestro lema. La cuestión es que el patriotismo de nuestros políticos y el consiguiente abandono de sus intereses personales a favor de España no tiene límites, puesto que incluso en peores circunstancias que las presentes volverían a hacer campaña electoral, y a tomar esas medidas tan peligrosas justo antes de una inminente reelección.

Por lo que se refiere a la prima que no debiera haber nacido, se respira un cierto alivio cuando ésta baja de los 500 puntos. Muy por debajo de esta cifra, el desastre sigue siendo tal que debiéramos correr despavoridos ante los pasos agigantados de GodzIVA, que reduce nuestras viviendas al precio de una lata de sardinas.

España va bien, dijo Aznar. Mientras tanto, aquí afirmábamos  que ho tenim tot per a conseguir-ho tot, y estábamos en lo cierto. La mano que nos tocó en la mesa de póker, en comparación con la inmensa mayoría de países del resto del planeta exentos de kilómetros de litoral mediterráneo, se ajustaba a estos eslóganes. Paul Newman fingía beber ginebra mientras jugaba la mano de su vida en un vagón de tren (El Golpe). Nosotros hemos ido siempre como cubas y así hemos logrado perder la partida con cuatro ases servidos. Al final habremos logrado hacer realidad aquella frase tan concurrida en los clubes militares:”con Franco se vivía mejor”.

Octavio Capó Truyols                                       Es Mascle Ros

(artículo publicado en OPINIÓN de Diario de Mallorca)